Es muy normal que los bebés duerman tan profundamente por las noches que nada los despierte. Ni siquiera las ganas de hacer pipí. Pero cuando se trata de niños más grandes que ya controlan esfínteres de día, seguir mojando la cama durante el sueño puede generarles mucha incomodidad o vergüenza. ¿Cómo acompañar adecuadamente a tu hijo en este proceso, sin presionar ni apurar sus aprendizajes?
Cuándo estará listo para dejar el pañal
El control de esfínteres es el proceso por el cual los niños aprenden a regular y retener voluntariamente la emisión de orina y heces. Es un hito importante del desarrollo infantil y suele ocurrir entre los 2 y los 4 años de edad, aunque este rango puede variar, dependiendo de los ritmos individuales de desarrollo.
Para que tu hijo logre el control de esfínteres es necesario que tenga cierto nivel de madurez física, cognitiva y emocional, además de haber adquirido algunas habilidades motoras y de comunicación.
Por lo general, los niños aprenden a controlar primero las ganas de hacer caca y luego, las ganas de hacer pipi. Del mismo modo, muchos niños controlan primero la orina del día y después la orina nocturna.
Enuresis infantil: mi hijo hace mucho pipi
Tal como dijimos al comienzo, es completamente normal y esperable que los bebés y los niños pequeños duerman tan profundamente por las noches, que pasen por alto las ganas de ir al baño. Sobre todo, si usan un pañal apropiado, que logra mantenerlos secos durante la noche, sin interrumpir su descanso.
Cuando esta situación se prolonga más allá de los cinco años, los especialistas comienzan a hablar de enuresis infantil y es una condición mucho más frecuente de lo que se piensa. Según estadísticas nacionales, a los cinco años de edad, un 15% de los niños presenta enuresis, en tanto que a los 10 años, esta cifra baja al 7%.
Hay varios factores que pueden influir en la enuresis infantil, incluyendo cierta predisposición familiar. Sin embargo, en la mayoría de los casos se trata solo de un tema de maduración, que se resuelve espontáneamente con el tiempo.
Si hace mucho pipi por las noches
Si tu hijo ya controla esfínteres de día, pero por las noches todavía hace mucho pipí y continúa mojando su cama, es fundamental que manejes la situación con calma. El control nocturno de esfínteres demanda un grado mayor de maduración de la vejiga, ya que el niño debe poder mantenerse seco por unas 10 horas, por eso es que sacar el pañal de la noche puede tomar más tiempo. Algunos consejos e ideas prácticas que pueden ser de ayuda:
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Un requisito esencial para lograr que tu hijo controle esfínteres (sea de día o de noche) es verificar que está dispuesto a colaborar en el proceso. Si el niño no se muestra interesado en abandonar el pañal, será mucho más difícil conseguir avances.
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Identifica las señales que indican que el niño está listo para dejar el pañal de noche. Estas son:
- Despierta seco en las mañanas.
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Durante el día se mantiene seco por períodos más largos, entre tres y cuatro horas.
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Se empieza a levantar en las noche, avisando que quiere ir al baño.
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Es importante que le transmitas confianza y seguridad a tu hijo y le muestres las ventajas de dejar de hacerse pipí por las noches. Hay que evitar mostrarse ansiosos o molestos y mucho menos, hacerlo sentir culpable si tiene pequeños retrocesos.
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Más que restringir la ingesta de líquidos, se recomienda regular los horarios. Es decir, que el niño tome más líquidos en las mañanas, un poco menos en las tardes y que los evite por las noches o antes de irse a dormir. Asimismo, se sugiere evitar cenas muy abundantes o con mucho líquido.
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Haz un registro de los horarios o momentos del día en que tu hijo suele ir al baño. Lo más común es que los niños vayan unas seis veces por día: después del desayuno, de la colación de media mañana, del almuerzo, de la once o colación de media tarde, después de la cena y antes de acostarse. Puedes ayudarlo a formar o reforzar este hábito.
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Si tu hijo continúa orinando mucho por las noches, puede ser útil llevar un “calendario del pipí” en el que registren las noches secas y las húmedas. Este registro le permitirá observar y celebrar sus progresos y, en caso de ser necesario, también podrías llevárselo al pediatra.
¿Cuándo consultar con el pediatra?
Hay situaciones específicas en que la enuresis infantil o dificultad para controlar la orina en los niños puede deberse a otras causas: desde temas emocionales hasta trastornos de salud. Aunque son casos excepcionales, es recomendable estar atento a posibles señales y, en caso de existir, comentárselas al doctor. Por ejemplo:
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Si la dificultad para controlar esfínteres del niño está asociada a una infección urinaria o a problemas para hacer pipí.
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Si tu hijo tiene 5 o más años y se muestra dispuesto a aprender, pero todavía se hace pipi en la cama con mucha frecuencia (al menos una vez al mes) y esta situación lo incomoda.
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Si el niño ya había logrado controlar esfínteres por algunos meses, pero luego vuelve a hacerse pipí. Esto podría ocurrir porque está nervioso, porque hubo un cambio importante en su vida o por algún problema en casa o en el jardín.
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Si esta situación afecta su autoestima o su calidad de vida.
Enuresis nocturna: cómo dejar el pañal de la noche
Como hemos visto, el control de esfínteres en bebés y niños depende de factores como la capacidad de su vejiga para retener líquidos; la producción de hormona antidiurética; la profundidad del sueño y la dificultad para despertar, entre otros. Pero en la mayoría de los casos, es solo un tema de maduración, que se resolverá con el tiempo.
El control nocturno de la vejiga es el que puede tomar más tiempo, ya que implica que el niño debe permanecer seco -sin hacerse pipí- por muchas horas, unas 10 o 12. Respetar sus tiempos, reforzarlo positivamente y evitar culparlo o avergonzarlo cuando no consiga sus objetivos, son estrategias indispensables para apoyarlo en este gran aprendizaje.
FAQs:
¿Cuándo es normal que un niño controle esfínteres?
La mayoría de los niños aprende a controlar esfínteres entre los 2 y 4 años de edad. Sin embargo, este rango puede variar según los ritmos de desarrollo individuales. Solo después de los cinco años se puede hablar de enuresis y es una condición mucho más común de lo que se piensa, afectando alrededor del 15% de los niños de esta edad.
¿Cómo ayudar a un niño al control de esfínter?
Para ayudar a un niño al control de esfínter el primer paso es asegurarte que tiene la edad adecuada y que está listo, física y emocionalmente. Además, es importante que esté dispuesto a colaborar en el proceso, que pueda verbalizar la necesidad de ir al baño y que pueda vestirse y desvestirse.
¿Qué pasa cuando un niño no controla los esfínteres?
Cuando un niño no controla esfínteres, puede ocurrir que aún no tenga la madurez suficiente para iniciar este proceso. La mayoría de los niños está listo para iniciar este proceso entre los dos y los cuatro años. Pero incluso a los cinco años, hay un 15% de niños que todavía no lo logra. En muchos casos, solo se trata de un tema de maduración, que se resuelve con el tiempo.
Fuentes relevantes de información:
https://es.childrens.com/health-wellness/potty-talk-with-the-docs