Recién Nacidos

Los diez cuidados básicos que necesita tu guagua en verano

Cuidado

 

Llega el verano y el ambiente se vuelve más espeso. Así como los adultos toman todo tipo de recaudos para no padecer las altas temperaturas, es necesario que también se le preste suma atención al cuidado de tu guagua.

La combinación de sol intenso, vientos calurosos y la arena de la playa no van a generar el ambiente más cómodo, sobre todo si tu bebé tiene menos de seis meses. Es por esa razón que los recaudos a considerar son más que importantes para no lamentar ningún sobresalto en la salud de tu bebé.

Por su bienestar, la recomendación para los recién nacidos es que paseen con el cochecito protegidos de los rayos del sol. Desde los seis meses en adelante es posible que comiencen a disfrutar del verano con padres, abuelos y hermanos. Siempre con la regla número uno: por tiempo limitado y sin incurrir en excesos.

La razón por la cual los pediatras recomiendan suma atención durante la época de altas temperaturas es porque los bebés son más sensibles al sol, al calor, a las altas temperaturas y a las corrientes de aire. También pueden llegar a manifestar reacciones ante los cambios de rutinas familiares que habitualmente se experimentan durante las vacaciones.

En el caso de que los padres noten que la guagua está muy molesta, es importante pensar que posiblemente tu hijo esté pasando calor. Como primera medida se recomienda tomar la temperatura con un termómetro, ten en cuenta que lo normal son entre 36°C y 37°C de temperatura axilar.

En el caso de los recién nacidos un dato a tener en cuenta es que en los primeros días sus extremidades estarán más frías que el resto del cuerpo. Esto no es una señal de que estén pasando frío ni mucho menos. Por eso no hay que dejar de tomar la temperatura si se observa que el bebé se encuentra molesto.

A la hora de trasladarse de un lado al otro es necesario preguntarse siempre por el bienestar de tu guagua. Tanto en el capazo como en la mochila, pueden pasar mucho calor. Es por eso que no se recomienda que estén mucho tiempo alojados allí. En lo que refiere al carrito, siempre es importante ponerle una funda de algodón. Lo más favorable es tener un carrito que se pueda adaptar para la época, los que permiten que se ventile el interior y llevan una protección UV.

Otra de las cuestiones a las que hay que prestar mucha atención es a los cambios bruscos de temperatura que se pueden generar entre la calle y los ambientes con aire acondicionado. Es necesario tomar recaudos para que ese contraste que se puede experimentar más de una vez al día no afecte a tu guagua. Se recomienda siempre tener a mano una mantita.

Más allá de estas recomendaciones generales, hay una serie de consejos que son trascendentales para el cuidado de tu guagua en el verano. Estos recaudos engloban la estadía en casa y la experiencia de vacacionar con tu hijo. Son conocimientos imprescindibles para que nada salga mal y que en familia puedan disfrutar de las temperaturas agradables. A continuación, los diez consejos básicos para cuidar a tu bebé en la época de calor.

1 - Cuidar la higiene

Las altas temperaturas del verano y la humedad que se genera en la zona del pañal hacen que el bebé transpire más. Esto puede generar consecuencias como dermatitis del pañal, lesiones en los pliegues cutáneos y pequeñas lesiones puntiformes que se diseminan por toda la piel.

Además del baño y las medidas de higiene generales, es necesario vigilar con más atención la piel del pequeño. Se recomienda aplicar cremas protectoras e hidratantes para evitar escoceduras y eritemas.

2 – Vigilar la alimentación

Lo primero que hay que saber es que durante el verano la alimentación del bebé no tiene que ser muy diferente a la del resto del año.  En el caso de que es lactante, la madre no tiene que cortar la alimentación. Eso sí, la madre va a tener ingerir un suplemento muy importante de líquidos para que la producción de leche no se termine resintiendo.

Mientras que en el caso de que el bebé esté tomando leche de fórmula, en las jornadas de  calor muy intenso es recomendable aumentar la dilución de las tomas añadiendo siempre 10 cc de agua por biberón. De esta manera se asegura que la guagua tome más agua y no se deshidrate.

3 - Elegir la ropa adecuada

En esos días en que las temperaturas son muy altas, elegir bien la ropa de tu guagua es importante. Se recomienda tener a mano mudas de prendas livianas para ir cambiandolas a medida que transpire, pero no debe permanecer desnudo.

Las recomendaciones generales son evitar plásticos y otros elementos sintéticos en el colchón y en la ropa para dormir, ya que esto puede hacer que aumente la sudoración. Otro punto a tener en cuenta es que los tonos de las prendas preferentemente tienen que ser claros y suaves.

4 - La hidratación ante todo

Durante el verano las necesidades de agua en la dieta aumentan, aunque en el caso de los recién nacidos la alimentación del bebé se tienen que seguir basando exclusivamente en la leche materna o la de fórmula. Ambas contienen una adecuada proporción de agua.

En épocas de calor muy intenso se le pueden ofrecer pequeñas cantidades de agua para suplir las pérdidas que provocan la transpiración.

En el caso de las guaguas más grandes, es importante tener a mano una botella fresca y ofrecerla de manera periódica en el día. La mayoría de las veces los niños la van a rechazar, pero la tarea de los padres será “perseguirlos” y lograr que se mantengan hidratados para evitar descompensaciones.

5 – Controlar el ambiente

La habitación del bebé durante el verano es conveniente que permanezca en penumbra. La temperatura no tiene que superar los 24ºC. El uso de aire acondicionado no está contraindicado, pero es necesario que la corriente de aire no impacte de forma directa sobre el niño.

Pese a contar con aire acondicionado, la habitación del bebé tiene que ser ventilada a diario durante una hora en el extremo del día, es decir cuando el sol ya bajó.

6 – Baños más largos

El baño diario que forma parte de la rutina de higiene de la guagua puede ser reforzado con otro más. También se puede extender en el tiempo para conseguir que el niño pueda relajarse por completo. La temperatura del agua puede ser un poco más fría que lo habitual.

En el caso de los bebés más grandes, a medida que crece es más factible que tu niño pueda disfrutar de una piscina o incluso de las aguas del mar si estás de vacaciones.

7 – Controlar que pueda dormir sin problemas

Los horarios de sueño en el caso de los recién nacidos pueden verse alterados levemente. Habitualmente el calor genera la tendencia de aumentar el sueño diurno. Lo importante es tener bajo control todas las variables que pueden llegar a generar incomodidad y generen perturbación en el sueño. La ropa y la temperatura de la habitación deben ser las adecuadas.

8 – Combatir las posibles picaduras de insectos

La prevención de la picadura de insectos es una prioridad para los padres en el cuidado de su hijo en la época de verano. Ya sea en la casa o al aire libre, el riesgo es alto.

Se recomienda la aplicación de repelentes cutáneos y la utilización de barreras mecánicas como pueden ser los “mosquiteros”. En el caso de utilizar insecticidas en la habitación del bebé, hay que procurar hacerlo con antelación al momento de llevar al niño a dormir.

9 – Atención extrema con la exposición al sol

Como se mencionó anteriormente, la guagua que tiene menos de seis meses de vida nunca debe estar expuesta al sol de forma directa. Cuando permanezca al aire libre se la tiene que proteger con filtros solares de alto índice de protección.

En el caso de los niños más grandes se recomienda evitar la exposición al sol por períodos prolongados de tiempo. Siempre es importante tener presente que la piel del bebé es muy vulnerable a las radiaciones solares. Sus mecanismos de defensa no son iguales a los de un adulto y esto se debe a su estado de inmadurez.

Por todo esto, tu hijo siempre tiene que estar protegido con un gorro, protector solar y en los posible en espacios en los que se pueda acceder rápidamente a la sombra.

10 - Preparar los viajes con mucha responsabilidad

El bebé puede viajar a cualquier edad y se lo puede trasladar por cualquier medio de transporte, pero siempre se debe respetar la premisa principal que es tener su comodidad como prioridad.

En el caso de hacer un viaje de muchas horas en auto, el mismo se debe planificar calculando las paradas necesarias para alimentarlo y mantener la temperatura del vehículo lo más fresca posible.

Siempre hay que tener presente los cambios de pañal y los cuidados de higiene. Estas últimas recomendaciones también se deben aplicar en viajes en tren, avión o cualquier otra vía de transporte.